Esto se lo escuche leer a jaime Garzón en la Universidad santiago de Cali, escrito por Antonio Morales.
"Informe
de una tripulación espacial procedente de la vía Acua. Informe
telemétrico realizado después de aterrizar y observar la tierra. Para
ver si era posible establecer un contacto intercultural.
Hemos
llevado a cabo la exploración que se nos encargó y hemos podido
observar de cerca sin ser observados, gracias a nuestras supersónicas
cortinas de humo, la superficie entera deIl planeta tierra y los cambios
que tienen lugar en ella. Cambios que, creemos son debidos a su mayor o
menor distancia de la estrella central de la cual recibe luz y calor.
Después
de observaciones repetidas y pruebas, hemos llegado a la conclusión de
que si existe vida vegetal y animal en el planeta tierra y hay en él una
gran variedad de seres vivos que hemos pasado estudiar con detalle.
La
especie más influyente parece ser la de unos bípedos de piel lisa que
habitan en colonias con una rígida organización. Los dichos seres vivos
habitan en hormigueros altos de forma generalmente rectangular con
celdas individuales para cada subgrupo o en algunos casos para cada
individuo. De estas celdas salen
todos aproximadamente a la misma hora y aparecen revestidos de
caparazones de diversos colores, aunque todos obedecen a un patrón
general que cambia con las estaciones. Después entran en unas cápsulas
de superficie metálica, con cuatro ruedas y se agrupan en líneas
apretadas unos detrás de otros a lo largo de canales cuidadosamente
trazados y avanzan lentamente durante largo rato en direcciones
contrarias. Conducta extraña cuya razón no hemos podido averiguar. Esas
máquinas producen grandes ruidos y humos
que según nuestras conjeturas, basadas en la frecuencia y cantidad de
esos humos, parecen ser la atmósfera que necesitan para sobrevivir y por
eso la renuevan constantemente. Por lo que toca a los ruidos, también
parecen una comunicación pre-vocálica destinada a mantener el contacto
con el grupo mientras cada individuo está en su propia cápsula.
Al
cabo de un tiempo, en el mismo día se invierte el proceso y las
cápsulas vuelven a los hormigueros de donde habían partido. Una vez en
ellos, por lo que hemos observado a través de las ventanas, se acomodan
frente a una pequeña pantalla que no falta en ninguna celda y en la que
aparecen sombras y luces al mando de un botón. Es posible que esa sea la
manera que tienen de alimentarse y por eso no pueden pasársela si ella.
Un
fenómeno extraño que hemos observado es que, con frecuente regularidad
se reúnen grandes multitudes de bípedos, en unos enormes anfiteatros
escalonados, desde donde observan a un reducido número de ellos, que
ejecutan rápidos movimientos difíciles de explicar en torno a un objeto
generalmente esférico, de mayor o
menor tamaño y dan grandes muestras de excitación mientras dura el
extraño rito. Quizá esto tiene alguna relación con el ciclo sexual de la
especie, pero no hemos podido confirmar esta hipótesis.
Lo
más inexplicable de todo lo observado es el echo que hemos comprobado
una y otra vez en medio de nuestro más aturdido asombro y es que los
dichos bípedos se atacan unos a otros sin razón o motivo alguno que
parezca poder justificar la agresión. Esto a veces entre individuos a
veces entre grupos y a veces entre clanes enteros por largos períodos.
Nada hay en nuestros propios conceptos que pueda explicar tan absurda
conducta.
Por
todas estas razones pues hemos llegado a la conclusión definitiva de
que los bípedos de piel lisa no son seres racionales, que la
inteligencia aún no se ha desarrollado en el planeta tierra, que tardará
aún muchas edades cosmológicas en aparecer y que, por consiguiente, es
inútil hablar de un contacto cultural con los seres que hoy habitan la
tierra. Nuestra misión ha terminado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Opina aquí sobre este tema o lo que quieras...